¿Cómo hacer la dieta perfecta? ¿Existe una dieta perfecta? ¿Cómo seguir y alcanzar mis objetivos? Casi todos, principalmente las mujeres hemos pasado por eso. Decidimos hacer un cambio, bajar de peso, llevar una vida más saludable, hacer ejercicio, pero de la decisión a la acción pasa algo, no sabemos qué hacer, la ansiedad nos mata o de plano perdemos la motivación. Lo principal y lo más importante es que creas y confíes en que puedes hacerlo, ¡tú puedes lograrlo! No pierdas la motivación, no olvides que ésta te asegurará el 50% de lo que sea que decidas hacer.
Primero lo primero
Aclaremos algo, no hay fórmulas mágicas, perder peso no es una competencia de tiempo ni contra los demás, es algo que requiere tiempo, esfuerzo y dedicación, debemos entender que llevar una mejor alimentación, ejercitarnos y descansar serán los pilares que te llevarán hacia la meta planteada sin que pongas en riesgo tu salud.
En el afán de buscar un cuerpo y peso ideal, podemos llegar a cometer muchos errores, entre ellos, el creer que existe una dieta que en pocos días te hará perder peso de manera saludable o que dejando de realizar alguna o algunas comidas también lograrás tan anhelado objetivo. Por lo tanto hemos preparado algunos puntos que podrán ayudarte a enfocarte y llegar a tu objetivo.
1. El agua es vida
El consumo de agua es básico para tener una buena salud, evitar enfermedades y mantener un peso saludable. Se recomienda tomar de ocho a diez vasos de agua por día. Beber agua nos ayuda a saciar el “hambre”, además se ha demostrado que beber tan sólo dos vasos de agua al día aumenta hasta un 30% la tasa metabólica. Es decir, aumenta en un 30% la velocidad de nuestro cuerpo para quemar calorías.
Si quieres lograr éxito en cualquier ámbito de tu vida, es indispensable que consideres el establecimiento de metas sólidas. Una meta es un resultado deseado que una persona o un sistema imagina, planea y se compromete a lograr: un punto final deseado.
Es importante que tu meta sea clara y concreta (si puedes dejarlo por escrito mejor) y a partir de ésta desarrollar tu plan de acción específico, el tiempo que te va a tomar y los recursos que vas a necesitar. No olvides ser realista en el tiempo, forma y recursos que necesitarás, insisto, no hay fórmulas mágicas.
3. Involucra a otros
“Si quieres ir rápido, ve solo. Si quieres llegar lejos, ve acompañado”. –Proverbio africano
Según la ciencia, cuando pasamos mucho tiempo con un grupo de amigos, comenzamos a adoptar algunas expresiones o sus hábitos y esto también influye en aspectos como el peso. Así que vigila los hábitos de la gente que está a tu alrededor, considera al menos a una persona que sea tu cómplice y tu equipo durante tu proceso, en ocasiones es muy fácil perder el objetivo y la motivación, es en esos momentos en los que necesitamos de un amigo que nos ayude a recordar por qué lo estamos haciendo y lo capaces que somos de lograrlo.
Comparte tu compromiso con tus amigos y familiares, coméntalo incluso en las redes sociales, esto te dará ánimos para seguir y será causa de orgullo cuando consigas tus objetivos.
4. Automotivación
“Eres el reflejo de lo que crees que eres”. Un consejo que te proponemos para encontrar esa fortaleza que te impulse a mantenerte firme en el proceso es escribir todos tus motivos que te han impulsado a perder peso, colócalo en tu celular, frente al espejo, en un sitio donde puedas verlo todos los días.
Oblígate a actuar, no escatimes en esfuerzos. Cuando tengas que hacer algo, hazlo, sin pensar en si te apetece o no, simplemente visualiza tu objetivo final.
Hazlo por ti. No olvides que la única persona responsable de lo que eres, haces y logras eres tú mismo.
5. Si pecas no lo abandones
Cumplir o satisfacer un antojo ocasional no es un gran problema, lo que sí es problema es que generalmente a partir de que “pecamos” decidimos abandonar el proceso. Si ya lo hiciste no pasa nada, no rompas todo tu proceso por un momento en que “rompiste la dieta”, continúa adelante.
6. Cena
La actividad física se reduce notablemente durante las últimas horas del día, momento en el cual vamos a la cama y si en ese momento del día comemos alimentos muy calóricos o “pesados”, el organismo no podrá utilizar estas calorías para su funcionamiento, y se almacenarán en forma de grasa, acumulándose en el cuerpo. Es por esto que una cena nos permitirá recibir los nutrientes y vitaminas necesarios y reducir el apetito, sin hacer excesos ni subir de peso.
7. Con amor y por amor
No lo vuelvas una obsesión, no te peses diario. Haz las paces con tu cuerpo y con tu físico. Ámate, ama y disfruta el proceso de tu transformación. Reconoce tus esfuerzos. Enamórate de tu proceso, celebra tus éxitos.
8. Busca ayuda
Acude con especialistas expertos que puedan brindarte toda la información, asesoría y dirección de acuerdo a tus necesidades personales para que puedas alcanzar tus objetivos de una manera sostenible y saludable.
Finalmente, si ya tomaste la decisión de iniciar un proceso de pérdida de peso, quieres llevar un mejor estilo de vida, mantener tu salud y mejorar tus hábitos déjanos un mensaje y permítenos ser tus aliados y acompañarte durante el transcurso de éste.
No lo olvides que la fuerza más poderosa para que alcances tus objetivos está en ti, en tu actitud y en que creas que lo puedes hacer.
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